¡Café Surcoreano! El Samsung Galaxy S8 será lanzado el se presentará el día 29 de marzo y se lanzará el día 21 de abril, quedando fuera del Mobile Word Congress de Fira Barcelona, Cataluña, España. La presentación oficial tendrá lugar en Nueva York.
Así lo asegura el influencer Evan Blass y lo ha publicado en Venture Beat.
Para la cobertura del Mobile Word Congress 2017 usamos la red de datos de Telefónica | Movistar.
Tendrá dos modelos diferentes, uno con una pantalla de 5,8 pulgadas y otro con 6,2 pulgadas, lo que sin duda son dos récords para esta gama. Y sí, también será unos 100 euros más caros de media que su antecesor: 800 y 900 euros, respectivamente.
Estas dos pantallas serán QHD Super AMOLED, con resolución 4K en un panel muy brillante. Las pantallas con bordes curvos, al estilo de los Edge, será descontinuada e integrado por completo en la gama ‘normal’.
El formato de las pantallas no será de 16:9, usado en la actualidad, evoluciona a un ratio de 18,5:9 y cubrirá casi un 83% de la superficie del frontal del teléfono.
Por el tamaño de las pantallas ninguno de los dos modelos tendrá botones por delante. El lector de huellas dactilares va detrás, como lo usa Huawei y esta al lado de la cámara de 12 megapíxeles (la cámara frontal es de 8 megapíxeles). Esto me gusta, es más práctico.
Por los problemas con el Note 7, las baterías no crecen y se quedan en 3000mAh y 3500mAh para los modelos de 5,8 y 6,2 pulgadas, respectivamente.
Para compensar esto, Samsung dice haber desarrollado nuevas tecnologías para conseguir un rendimiento entre un 11 y un 23% superior a su antecesor, pero con un gasta menos de un 20% en consumo de energía. ¡Que gran detalle!
Hardware superior ofrece el S8: 4GB de RAM y darán el salto a los 64GB de almacenamiento [Adiós a la versión de 32 GB]. Este espacio podría ampliarse con tarjetas microSD de hasta 256GB. Con respecto a los puertos, se cargará mediante USB-C y, sí, tendrá una entrada tradicional de 3,5mm para los auriculares.
Un rasgo interesante es el asistente de voz, Bixby; según voceros de la marca, podrá asumir instrucciones más complejas que sus competidores, pero esto tendrá que demostrarse con hechos y no con palabras.