El éxito del modelo Moto G en ventas le ha brindado a Motorola un nuevo respiro y eso ha traído 3 buenas consecuencias que colocan a la marca en la boca de todos y le permiten jugar en el mercado tan competido de smartphones bajo este sistema operativo Android.
1. Moto X: Aunque este fue el primer modelo que vimos llegar, con un diseño interesante y unas propuesta de valor en su hardware y su versión modificada de Android OS, no fue sino hasta la llegada del Moto G que bajó un poco de precio ubicando la alta gama por debajo de los 500$.
2. Moto E: El aporte en la gama media con un modelo como el Moto E permitió a la marca Motorola llevar el reto más arriba, crear un teléfono móvil para la gama más baja de Android, que conservara su alto valor y que lo colocara en un precio competitivo frente a los features phones (teléfonos celulares sin sistema operativo).
3. El patrón: En este momento Moto G es una meta a alcanzar, una regla con una medida. Las marcas deben conseguir un alto valor en un dispositivo dentro de una gama tan competida. La versión KitKat de Android contribuye a desarrollar más en estas gamas.
Justamente se cree que Moto E en Android será el próximo dispositivo que fijará un punto de inicio para los teléfonos móviles de gama de entrada, los más económicos que deberán ofrecerle más que una opción a los consumidores.